Las propuestas de las Fiestas Clandestinas reúnen cada vez más a un público con ganas de divertirse y pasar una noche con buena música. No conformes con las que se realizan en Groove cada fin de semana, decidieron poner en marcha la ya conocida “Clandestina Delux”. La cita era el sábado en el Estadio Cubierto Malvinas Argentinas; el plato fuerte de la fiesta eran Los Auténticos Decadentes y Kapanga.

Pasadas las 11 de la noche, los alrededores del microestadio se transformaron en un escenario para los artistas del Circo Clowndestino, quienes entretenían a los que estaban entrando. Pasaron bastantes minutos de la hora estipulada para el primer show y la gente seguía ingresando al sector del campo, lo que generó un atraso importante en el cronograma planteado por los organizadores.

A las 00:50, las luces se apagaron y la banda liderada por Cucho Parisi irrumpió en el escenario. “Somos” fue el tema elegido para dar comienzo a la fiesta y el público respondió con mucha alegría y globos por doquier. Los clásicos “Como me voy a olvidar”, “Pendeviejo” y “Los piratas” fueron muy coreados y lograron calentar la noche por completo. Sin perder tiempo y de la mano de Diego Di Marco, sonaron los temas “Besandote” y “El gran señor”.

Como no podían faltar, tocaron “Tribus urbanas” y “Distrito federal, los dos corte y difusión de su nueva placa “Irrompibles”. Jorge Serrano al mando del grupo, cantó “Un osito de peluche de Taiwán” y “Confundido”, llevando así, la tranquilidad al campo.”Gente que no”, contó con la participación de Mikel de Kapanga para realizar una versión mas roquera del tema. “La guitarra”, el himno elegido por excelencia, puso fin al set de una de las bandas más festivas del país. Una hora de show logró dejar muy eufórico a los presentes, quienes sabían que todavía faltaba mucho más.





Cerca 2:30 de la mañana, Kapanga salió a la cancha y “Miami” puso nuevamente en movimiento al campo. Mientras sonaba “El universal”, dos situaciones generaron algo de confusión: por un lado, una importante pelea por alguien que estaba rateando en el público; por el otro, un corte total de sonido. Para calmar un poco las cosas, Mikel atinó a decir: “A mi me robaron la virginidad”. A la lista de temas no le faltaron clásicos como “Ramón” y “Fumar”, que generaron grandes pogos por parte de los fanáticos. Un primer compilado reunió a “Elvis”, “Maté a mi madre”, “Extraño” y “Desesperado”. Como vienen haciendo últimamente, luego de agradecerle a Virus por la amistad, dieron paso al cover cuartetero “El probador”.

Otro compilado hizo vibrar a los presentes con temas como “Cecator el borracho”, “Amor secreto”, “Agujita de oro” y “Amor de mañana”. “Cristian U, sos una mentira”, criticó sin ningún motivo el Mono al integrante de Gran Hermano. Luego, se bajó del escenario para compartir junto con la gente “Desearía”. Poco faltaba para las 4, cuando Claudio Maffia desde la batería preguntó “¿Quieren rock?” y descontrol y alegría fue lo que trajo “Rock”.

“Acuérdense que este año hay elecciones. No voten al que nos quería hacer dormir. Hoy seguro que no duerme nadie”, dice el carismático cantante y “El mono relojero” cerró una noche a pura fiesta.
El público demostró estar satisfecho por completo con este dúo que tanta felicidad transmite. Luego de los shows, la mañana estaba más cerca que nunca y muchos
comenzaban a dejar el lugar. Pero otros, aún con ganas de seguir divirtiéndose, se quedaron por la música y la cerveza libre de cada fiesta clandestina.

Crónica y fotos: Nicolas Lopez Becerra

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