El Zona Rock tuvo su nueva edición luego de una gran convocatoria en diciembre del 2010, que reunió a La Vela Puerca, El Bordo, Las Pelotas, El Cuarteto de Nos, Arbolito y Nonpalidece, entre otras.. En esta oportunidad, la expectativa parecía ser mucho más grande: bandas que vienen remando su etapa under, fueron convocadas a la par de grupos con más seguidores (a pesar de que serían casi los mismos del año anterior).

El viernes 27, el Microestadio Malvinas Argentinas de la paternal recibiría a Sordos, Salta la Banca, El Bordo y Ciro y los Persas, en el que sería el día uno del festival.

La banda oriunda de Wilde, Sordos, fue la encargada de calentar el escenario cerca de las 18:20. Con mucha potencia y gran decisión se plantaron para hacer “Lombrices”, tema que inauguraba el set. A medida que pasaba el tiempo, el microestadio comenzaba a llenarse, pero pocos pudieron disfrutar del grupo que presentaba “El precio de la independencia”, un demo que adelanta el próximo material a editar. De allí salieron temas como “Remando el gomón” y “Villa la paz” que demostraron la energía y madurez a la hora de tocar. El gran cierre fue con “Algo llega al final” que generó los aplausos del público en forma de aceptación y apoyo para con la banda.

Salta la Banca, el grupo encabezado por Santiago Aysine y que logró tener mucha repercusión en los últimos meses por participar en El Bombardeo del Demo junto a Las Pastillas del Abuelo, apareció cerca de las 19:10 para comenzar a puro agite con “Mercedes”. “Somos Salta la Banca y vinimos a hinchar las pelotas”, aseguró el cantante, que no paró de pasear por el escenario y acercarse a los fanáticos. De apoco la fiesta comenzaba a crecer (casi como una previa de las bandas que seguían) y el público no dudo en saltar y cantar temas como “Que nunca se repita” y “Que salte la banca”.
Más que agradecidos, los saltimbanquis (así se conoce a los seguidores) y los que recién llegaban, disfrutaron del sonido y ritmos de ska y reggae que se asomaban a través de un saxofón y una armónica. “Este tema habla de lo que podemos ser”, adelantó Santiago (que se lo vio muy contento del momento que estaban viviendo) antes de hacer “Somos”, canción que muestra el lado más compositor del grupo y las ganas de transmitir un mensaje. Para dejar en claro las ganas de plantar fiesta y alegría, “Sueño” finalizó con broche de oro el set con una comparsa que irrumpió en el escenario para acompañar a la banda.
Plateas y populares llenas; un campo no tan colmado pero con ganas de disfrutar del buen rock. Las luces se apagaron por completo y “Noche extraña” anunciaba la llegada de El Bordo al festival. Sin ningún tipo de preámbulos le siguieron “Jazz barrial” y “Siento”, que pusieron al público a corear con mucha energía. “Buenas noches”, saludó por fin Ale Kurz, voz y guitarra líder. Varias banderas colmaron el campo mientras reinaba algo de tranquilidad: “A dónde vas?” había logrado bajar por un momento la euforia de los seguidores que pedían ver a El Bordo desde hacía unos meses.
Para volver a romper el hielo sonó “El regreso”, uno de los corte y difusión del disco “Yacanto”, que hizo vibrar por completo el lugar. Sin defraudar y con las intenciones en alto de continuar con el rock and roll, la armónica fue la principal protagonista de “La banda”. “Nos vamos a casa?... Hace frío...” preguntó Kurz para finalizar el show a pura fiesta con “Cansado de ser” y pegado “En la vereda”.

Minutos después de las 22, el fin de la música de fondo y las luces a medio apagar anticiparon la aparición de Ciro y los Persas, banda del ex Piojos Andrés “Ciro” Martinez. Banderas típicas con el logo de los Piojos parecieron hacer una regresión en el público, algo así como la vuelta del mítico grupo al escenario. “Banda de garage” fue el tema elegido para abrir la noche con mucho descontrol por parte de los fanáticos. “Vamos los piojos” se escuchaba en el campo luego de sonar “Te diría”; misma tranquilidad y apoyo se vivió “Paso a paso”, canción que parece hacerle frente a las críticas entre sociedades diferentes.
“Buenas noches Buenos Aires! Buenas noches Malvinas Argentinas... ¿podremos decir alguna vez eso?”, repudió Ciro frente a la situación de las Islas Malvinas. Sin perder el hilo con lo que hizo durante tantos años, el rock and roll invadió el lugar de la mano de “Media caña”; pegado le siguió “De lejos no se ve” que generó gran descontrol entre los presentes. “Tenemos una duda – admitió la voz lider – no sabemos si tocar Pistolas o Buenos Tiempos. Hagamos una votación”. Luego de contar manos levantadas al por mayor (pidiendo por ambos temas), sonó “Buenos Tiempos” para que varios seguidores recordaran viejas épocas.
Con la simpatía que lo caracteriza a la hora de subirse al escenario, Ciro se la pasó animando al público y yendo de un lado al otro mientras cantaba “Blues del gato sarnoso”. Para el agrado del público tocaron “Pistolas” y sin respiro alguno “El Farolito” puso en completo agite al campo. Para retomar algo de clima entre tanta fiesta, dieron paso a “Insisto”, último corte de difusión de su placa. “Para el guiness: un solo de pato!”, anunció Ciro, luego de que apareciera un pato en escena; era la hora de “Chucu-chu”.

El final estaba por llegar y nadie podía quejarse luego de una gran lista de temas que recorrió hits piojosos y, por supuesto, los temas de los persas. “Cruel” y “Babilonia” pusieron en alto los coros de los fanáticos, pero más alto los pogos y las banderas. “Noche de hoy” cerró la presentación de Ciro y los Persas que hacía poco habían estado en el Luna Park, con convocatoria solo a través del Facebook oficial. Como siempre, uno por uno el cantante leyó las banderas para agradecer a los barrios que estuvieron presente. Pasada la media noche, el público salió más que satisfecho por dos razones: la ya mencionada fiesta (pseudo piojosa) y por la noticia de la presentación del grupo en diciembre en el Luna Park.

Crónica: Nicolas Lopez Becerra + Fotos: Gentileza Rock&Reggae

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