“Excéntricos”, “bizarros”, “impecables”, “muy Spinetta todo”, “prolijos”, “flasheros”, son algunos de los adjetivos que se escuchan al opinar sobre Sig Ragga. Los Santafesinos se presentaron nuevamente en Niceto Club, logrando una convocatoria más que satisfactoria para todos. Tal como estaba estipulado, a las 21hs. se abrieron las puertas del boliche de Palermo, para que rápidamente, quienes estaban esperando afuera, ingresen ansiosamente al reducto. 

Solo 1 hora y monedas de espera hizo falta para que el telón de Niceto se abra, con una pista de un piano, sonando suave para introducir a los músicos al escenario. Repentinamente, “Quise ser” abrió el show, una de las canciones más cantadas por el público, donde no faltó el sondeo del público, cada uno bailando a su ritmo con una música para admirar desde distintos puntos. Sin descanso, “Orquesta en descomposición” seguida de “El niño del jinete rojo”, donde, casi como un juego, el público coreó la frase: “Vuelve a caer…vuelvo a creer”. Luego de una introducción que no se encuentra grabada en la versión de estudio, llegó la hora de “Puntilla If Kaffa” canción que, como Orquesta en descomposición, cuenta con su letra formada con palabras extrañas, atribuyentes a un idioma francés o africano, por lo menos de oído.



Durante un show de Sig Ragga, la imagen estética que la banda propone, dispone a pensar que los músicos son una especie de robots, extraterrestres, o algún ser sobrenatural. Quizás sea la complejidad de sus composiciones (apoyadas por pistas, tal como nos contaron en su entrevista) y la propuesta artística, luminosa, sonora y teatral que brinda esa imagen. Continuada, sonó “Invocación”, donde Gustavo Cortés, tecladista y voz principal de la banda, tuvo el primer contacto visual con el público. Posteriormente, “Chaplin”, segundo corte de su segundo disco Aquelarre, aterrizó en Niceto para invitarnos a un nuevo viaje musical, cuyo final fue una ovación de los asistentes. “Continuidad de lo indecible” y “Severino Di Giovanni”, esta última mostrando el lado más “oscuro y tenebroso” de la banda, canciones pertenecientes a su primer trabajo de estudio, continuaron con la lista de temas. “Escalera y barco”, con un completo groove dominante del bajo, fue la canción que invitó a la primera interacción entre la banda y el público para corear el estribillo de la canción. Siempre haciendo hincapié, y reforzando el concepto de la vasta propuesta artística que ofrece Sig Ragga, es de destacar que, en vivo, a veces uno siente la necesidad de permanecer en silencio todo el show, porque eso es justamente lo que los músicos hacen: adueñarse de los silencios, como así también de los ruidos, de los aplausos, de las palmas, y de todo lo que se encuentre a su merced en un concierto.


Cuchillos”, interesante canción temática sobre la democracia, seguida de la canción que los llevó a su primer nominación para un premio Grammy: “Resistencia indígena”, otra canción que tiene lo suyo en cuanto al impacto literario. La introducción, inigualable, la delató: “Abrir y cerrar de noches”, acompañada de varias luces apagadas, casi dejándonos a oscuras, y haciéndonos intentando separar los sonidos de la canción, nunca teniendo éxito, siguió volándonos la peluca a los presentes. Canciones más dulces y amorosas, Sig Ragga nos deleitó con “Pensando”, donde el cantante dejó la pista del teclado sonando, y se acercó hacia el frente para bailar al compás de la música, “En el infinito”, nuevamente con la pista sonando para que, nuevamente, el vocalista cante al frente del escenario, dejando su instrumento atrás.


Arañando el final, “Tamaté” y “Feliz” casi dan por finalizado el show, haciendo que los músicos se retiren del escenario. Luego de unos minutos de palmas, arengando el público, volvieron a salir a escena para culminar, definitivamente, con “Rebelión de esclavos técnicos” y “Matata”, terminándonos de partir la cabeza a los presentes. Rozando las 12 menos cuarto de la noche, luego de 1 hora y media de show, Sig Ragga se retiró victorioso del escenario.

Por lo pronto, y como adelantaron en la entrevista que les realizamos, se encuentran tocando por algunas provincias de nuestro país y preparando lo que será su tercer disco de estudio. En mi dRockga, estaremos atentos a esas novedades para compartírselas.

Fotos: Maia Cinalli

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